domingo, 10 de noviembre de 2024

Historias de Cumpleaños: 30 de junio de 1981

30 de junio de 1981.Cada jueves, por la noche, se presentaba el curandero, Don Juan, a ver al padre de Alejandro, que estaba deprimido.Usaba tinta china para sus curas. Estaba en medio de sus curaciones, pronunciando oraciones en una lengua desconocida, cuando decidió interrumpir la sesión. -Nicolas, creo que estacione mal el auto!Ya vengo! -Las llave estan en la puerta!La más larga es la de la calle! - dijo Nicolas. -Hiciste el dibujo para el jardín? - pregunto la madre. -Lo hice en la casa de María Laura! La madre se dirigió al cuarto a verificar si se había despertado la beba, que tenía meses, para darle la mamadera.El niño quedó solo en la cocina, con Tom y Jerry en la televisión blanco y negro de fondo.Escucho ruido, provenía del living.Con sigilo se dirigió hasta allí.Vio a Don Juan robando un jarrón azul, regalo de casamiento de sus padres.Alejandro lo espiaba desde detrás de un sofá.El hombre se encaminó hacia la puerta y bajo a la planta baja. -Ma!Ma! - grito Alejandro. La madre, preocupada, le pregunto que pasaba. -El señor que cura a Papito se llevo el jarrón! Cuando el curandero regreso y abrió la puerta, la madre lo increpó. -O devuelve el jarrón o llamo a la Policía! -Acá hay un mal entendido, señora... -Traigalo ya!Y no vuelva nunca más! Don Juan, furioso, juro vengarse.Un sexto sentido, que poseia desde chico, le hizo saber que el delator era el niño, Alejandro. María Laura salió para cumplir con un recado que le dio su madre. -Te voy dejar ir al cumpleaños de Alejandro hoy a la tarde, pero primero tenes que ir a comprar el pan y la carne! Camino hacia la esquina, con intención de cruzar la calle, y desapareció, como si fuese un espectro. Su madre, al ver que su hija no llegaba, salio a buscarla.Al no hallarla, llamó a la Policía. 30 de junio de 2022.Era su cumpleaños número cuarenta y seis, y Alejandro no pensaba celebrarlo.Hacia años que no se veía con sus amigos y no era buena idea invitarlos, si lo festejaba.Los mejores cumpleaños de su vida ya habían pasado y vivían para siempre en su memoria.Sin embargo, tuvo ganas de volver al barrio de Palermo, donde vivió hasta los siete años y medio, antes de que sus padres se separasen. Visitó su antiguo colegio, el San José, su casa y la plaza donde jugaba.Estaba por volver, cuando se le ocurrió hacer una última visita, la casa de María Laura, su amiguita del jardín de infantes.Vivía a la vuelta de su casa de la calle Acevedo.La niña que un día salió a hacer mandados y se la trago la tierra. Camino por la calle Honduras, llegó a la esquina para doblar en Gorriti.De improviso, se chocó con una niña.Lo curioso es que apareció de la nada. -De donde saliste?! - dijo. -Perdón, señor!Yo tampoco lo vi! -Te conozco?No..no puede ser..te pareces a una amiga que tuve hace mucho tiempo...se llamaba María Laura y usaba anteojos como vos! -Yo me llamó María Laura, señor! - dijo la niña. -Increíble!Falta que me digas que vives en la casa de enfrente...! -Si, vivo allí!Con mi mama, mi papa y mis dos hermanos! Un escalofrío recorrió su cuerpo.Trató de buscar una explicación racional, pero no la encontró. -En que año estamos? - balbucio. -En 1981!No lo sabe? - dijo María Laura. Un hombre paso a su lado, riéndose a carcajadas. -Conozco a ese tipo?Ey!De que se ríe? El hombre se paro y lo miro fijo. -De nada, Joven!Por que me lo pregunta? - dijo el hombre. -Lo conozco de algún lado? -Me llamó Juan!Me dicen Don Juan!Usted es Alejandro, no? -Como sabe mi nombre?! Don Juan desapareció.Se esfumó. -Donde esta el hombre que me estaba hablando? - dijo Alejandro. -Que hombre?Usted estaba hablando solo! - dijo María Laura. -Que esta sucediendo?No entiendo! - dijo Alejandro. -Que sucedió con mi casa?Desapareció! - dijo la niña. Alejandro y María Laura cruzaron la calle hasta donde estaba emplazada la casa.En su lugar había una relojería.Alejandro miro por la vidriera los relojes digitales que indicaban la fecha, 30 de junio de 2022. -Quiero ir con mi mama!Tengo un cumpleaños y me tengo que bañar! - dijo María Laura, angustiada. -Creo que conozco a la persona que cumpleaños!Te llevaré a la fiesta! - dijo Alejandro. -Conoce a Alejandro, mi amigo del jardín? -Lo conozco muy bien! Caminaron hasta la casa de Alejandro.Este estaba en plena fiesta, en su pieza, con su primo Diego, abriendo los regalos.Habían ido todos los compañeritos del jardín, menos María Laura.Pregunto todo el día a su mama por que no contestaba sus llamadas telefonicas, pero seguía sin saber nada de ella.Escucho que salió a comprar y no regresó.La música sonaba fuerte, eran canciones de los Parchís y de Quico, el del Chavo. La madre entró a la pieza. -Tocaron timbre!Baja!Deben ser las Animadoras! Los padres de Alejandro contraron a dos chicas que animaban fiestas.Organizaban juegos y cantaban canciones para entretener a los chicos. Alejandro corrió, abrió la puerta y bajo por las escaleras.Abrió la puerta de la calle y se encontró con María Laura, acompañada de un hombre. -Hola, amigo!Traigo una amiga que quiere festejar tu cumpleaños con vos! - dijo Alejandro adulto. -Hola, María Laura!Donde estabas? - dijo Alejandro niño. -Salí a hacer compras!Puedo pasar? - dijo la niña. -Bueno, chicos!Los dejó!Pasenla lindo!Y feliz cumpleaños, Alejandro!No se cumplen cinco años todos los días! -Gracias, señor!Lo conozco de algún lado? -Quizás!Pero ahora eso no importa!Lo unico que importa es la torta, las animadoras, las canciones, los juegos y los amiguitos! María Laura ingreso a la casa junto a Alejandro Niño. La escena desapareció como un velo fantasmal.La casa recobró su actual aspecto.Reconoció el presente y decidió que ya era hora de regresar.Quería llegar temprano y acostarse.Al día siguiente tenía que trabajar. Fin

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